viernes, 17 de noviembre de 2017

La serie "El Ministerio del Tiempo" vista desde Brasil_Capítulo 2 (Temporada 2)

Capítulo 2: “El tiempo en sus manos”
Crítica por Alexsandro Macedo Silva


“El tiempo en sus manos” es el título del décimo capítulo de la serie “El Ministerio de Tiempo”, que representa el dilema vivido por sus héroes. Particularmente, este capítulo está presentado en un tono pasteloso, con poca luz, con escenas oscuras, introduciendo al espectador en un mundo, o  un momento, sombrío y triste. Tal vez, más sombrío que triste, transmitiendo una sensación siniestra en la primera escena. Una mujer joven es asesinada frente a su hijo por un viajero del tiempo. Pero, ¿quién es el viajante asesino?

Para obtener esa respuesta, un nuevo personaje aparece en el Ministerio: Pacino (Sí, ¡hace referencia a Al Pacino, el actor!), que es un policía de la década de los 80. Pacino es testigo del asesinato de la mujer y ve al asesino huir por la puerta del armario. Así que, cumpliendo su papel de policía, Pacino persigue al asesino por el armario, pero su viaje por el tiempo termina (¡o empieza!) en el Ministerio del Tiempo de 2016. 

A partir de ese momento, se desarrolla la trama y se descubre que se trata de un asesino en serie que ha matado a varias mujeres. El viajante asesino transita por el tiempo por medio de una puerta que no está controlada por el Ministerio. (¿Cómo es posible que existan puertas del tiempo que no están controladas por el Ministerio? Sí, descubrimos que existen...) El asesino en serie tiene que ser detenido para evitar otras muertes y desvelar el misterio.


Por supuesto, el asesino es capturado y el equipo se enfrenta a un dilema ético utilitarista: ¿No podrían viajar por el tiempo y matar al asesino para evitar las muertes de las mujeres y evitar así que sus hijos permanezcan huérfanos? El Director no apoya la idea porque no se sabe cuáles serían las consecuencias para el presente. Por lo tanto, esa situación deberá permanecer tal y como está. Pero, Pacino no se convencerá y desaparece al día siguiente. ¿Adónde se fue? Todos piensan que Pacino volvió a 1946 para evitar el suicidio de su padre, por lo tanto, Amelia y Alonso van a su encuentro para impedir que haga algo que pueda comprometer el futuro.

Ese es el momento más grandioso, épico, del capítulo porque Pacino no estaba en 1946, sino en otro tiempo. Los diálogos y las escenas están muy bien hechas, hasta tal punto que logran que el espectador se cuestione: “¿Qué pasa?, ¿Quién es el hombre que Pacino encontró?, ¿Por qué tiene la intención de matarlo?” Amelia y Alonso, al mismo tiempo, encuentran al asesino en serie, pero ¿lo matan?

¿Queréis descubrir qué sucederá? Entonces, ved el capítulo y sorprendeos con el final. ¡Ah! Una cosa más, parece que hay una conspiración dentro del Ministerio. ¿Quién es el conspirador? Mmmm... ¡Vamos a ver!

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