martes, 30 de octubre de 2018

Pregunte a la Duquesa sobre "Derechos humanos"

¡Hola, mis queridos correveidileanos!


¿Cómo estáis? ¡Bien, espero, y enganchados a vuestros estudios de español! En este período de tanta discusión sobre los derechos y deberes de los ciudadanos, sobre cómo queremos que sea nuestro futuro y de deseo de transformación, me pareció interesante abordar en mi columna claves sobre las Cortes transnacionales y cuestiones relacionadas con los Derechos Humanos, con la expectativa de ayudaros en vuestros futuros debates.

En primer lugar, en cuanto el nombre oficial en español del organismo judicial encargado de dirimir ciertos tipos de litigio internacional entre los Estados es Corte Internacional de Justicia, y su sigla es CIJ. Otras denominaciones, como corte de La Haya o tribunal de La Haya, se escriben con inicial minúscula por no ser nombres propios de la institución.


La ciudad holandesa donde tiene sede este organismo se llama La Haya, y su gentilicio es hayense. En este caso, el artículo definido la se escribe con mayúscula, puesto que  forma parte del nombre propio de la ciudad. Asimismo, los nombres oficiales de los tratados y convenios se escriben con mayúscula inicial en todos sus elementos significativos, como por ejemplo: Pacto de Bogotá. Sin embargo, en las denominaciones de conflictos bélicos, solo es necesaria la mayúscula en los elementos específicos, mientras que el sustantivo genérico guerra se escribe con inicial minúscula (guerra del Pacífico), como recoge la Ortografía.

A su vez, la abreviatura de relaciones exteriores en alusión a ministerios y organismos, se plasma del siguiente modo: RR. EE., con un espacio entre las dos partes y con punto al final de cada una de ellas, y no R.R.E.E. ni RR.EE. Del mismo modo, las expresiones latinas usadas en el ámbito judicial, como ad hoc, inter partes, ius cogens, pacta sunt servanda, entre otras, se escriben en cursiva o entrecomilladas según las normas vigentes. Los términos formados con prefijos, como coagente, contramemoria, redúplica, etc., se escriben en general en una sola palabra. 


Además, es importante añadir que el Diccionario panhispánico del español jurídico define crimen (y no delito) de lesa humanidad al ‘crimen de especial gravedad, como el asesinato, el exterminio, la esclavitud, la deportación o el traslado forzoso de población, la privación grave de la libertad o la tortura, que se comete como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil y con conocimiento de dicho ataque’.

Esta denominación es también la recogida en el artículo siete del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, de modo que se aconseja emplear la palabra crimen en lugar de delito, que engloba cualquier quebrantamiento de la ley, sea o no grave.  


Bueno, mis queridos, lectores, creo que para empezar buenas discusiones ya tenemos excelentes expresiones. Sin embargo, ¡seguro que volveremos a este tema! Espero, como siempre, haberos entretenido y animado en vuestros estudios. 

La Duquesa

domingo, 28 de octubre de 2018

Musiclicando retro: Los tres Diamantes y sus bodas de oro con "La gloria eres tú"



Musiclicando Retro os presenta a Los tres Diamantes. El año era 1949, por lo tanto, ya existía el mayor de los tríos, Los Panchos, pero aun así, tres jóvenes, Enrique Quezada, de 28 años y primera voz, Gustavo Prado con 25 años, guitarra y segunda voz, y Saulo Sedano, de 23 años, con su requinto diferente y creativo, formaron este nuevo trío, puesto que ya actuaban en el panorama musical: Enrique era un gran solista que sonaba en la radio, Gustavo era el protagonista del trío Janitzio y Sedano era un gran requinto y tercera voz.

No obstante, la mayor preocupación del nuevo trío era seguir un estilo musical propio en sus presentaciones, algo que fuera diferente de Los Panchos, lo que resultaba muy difícil, porque en la época, esa era la principal agrupación de serenatas y boleros. A pesar de la dificultad, Los tres Diamantes encontraron su propio estilo. Por otra parte, aunque eran muy jóvenes, los tres músicos tenían mucha capacidad y talento. Por eso, Raúl Prado se los acabó presentando a José Agustín Hernández un día en el que, casualmente, estaba presente María Grever, que era una gran compositora mexicana que estaba grabando "El último capítulo de su vida", un programa de radio.

Entonces, José le pidió a esta compositora que escuchara al trío, pero María se resistió porque Salvador Hernández era su intérprete, ya que ella quería que sus canciones fuesen para solistas y no para tríos. Sin embargo, Hernández le insistió un poco más y María Grever acabó aceptando. De ahí que la nueva agrupación le cantase su tema, titulado “Mi canción”, y María se quedó callada, enseguida le cantaron “Cuando me vaya” y ella se emocionó hasta llegar a las lágrimas. En ese momento fue cuando le solicitó a Salvador Hernández que ese trío cantase en El último capítulo...

Por lo que sigue, Los tres Diamantes, a partir de ahí se convirtieron en intérpretes de la importantísima compositora, María Grever. Por consiguiente, Raúl Prado los llevó a la RCA Víctor, con Mariano Rivera Conde, donde los contratan y graban “Mi canción” y “Cuando me vaya” de María Grever en el primer disco. En el segundo incluyen “Ave sin nido”, de Enrique Fabregat, y “Mentira, mentira”, del propio Saulo Sedano. En el tercer disco graban la canción que marcó el inicio de la fama del trío, “Miénteme”, de Chamaco Domínguez.


Entonces resulta que, el trío comenzó a ocupar espacio entre los más destacados y exitosos artistas, gracias a los bellos arreglos vocales y el requinto único de Sedano; aun por encima, los integrantes del referido trío eran compositores, Saulo compuso “Yo quise ser bueno”, “No te perdonaré”, “Mentira, mentira”, No me importa el pasado” y “Sayonara”. Por otro lado, Gustavo Prado compuso “María”, “Se fue mi amor”, “Lindo Sakura” y “Amar qué divino”.

Asimismo, el trío Los tres Diamantes, desde su formación en 1949 hasta los más de 50 años de carrera, se mantuvo con los mismos integrantes, hecho raro entre los tríos. Por eso grabaron más 200 canciones, entre las cuales están algunas de las más (re)conocidas por el público: “La gloria eres tú”, “Usted”, “Reina mía”, “Condición”, “Sigamos pecando”, “Miénteme”, “Luz y sombra” y “Cuando me vaya”. 

En otras palabras, según Gustavo Leal Benavides, Los tres Diamantes está considerado como uno de los seis grandes tríos de todos los tiempos. Por esta razón, celebraron sus bodas de oro, después de muchos años juntos y muchas giras por varios países, así que El Blog correveidile y yo os invitamos a abrir las viejas ventanas del pasado para que escuchéis esta bella canción compuesta por el gran compositor cubano, José Antonio Méndez e interpretada por el trío Los tres Diamantes. La canción se titula “La gloria eres tú”, ¡Incluso porque los diamantes son eternos!”

             ¡Esperamos que la disfrutéis!

Jorge Martins de Almeida




La gloria eres tú”

Eres mi bien
lo que me tiene extasiado.
¿Por qué negar 
que estoy de ti enamorado?
De tu dulce alma,
que es toda sentimiento.

De esos ojazos negros
de un raro fulgor,
que me dominan
e incitan al amor,
eres un encanto.
¡Eres mi ilusión!

Dios dice que la gloria
está en el cielo,
que es de los mortales
el consuelo al morir.
Bendito Dios,
porque al tenerte yo en vida,
no necesito ir al cielo tisú
si, alma mía 
(amor de mi ilusión),
la gloria eres tú.

De tu dulce alma
que es toda sentimiento.
Eres un encanto,
¡Eres mi ilusión!

Dios dice que la gloria
está en el cielo,
que es de los mortales
el consuelo al morir.

Bendito Dios,
porque al tenerte yo en vida
no necesito ir al cielo tisú,
si, alma mía
(amor de mi ilusión),
la gloria eres tú.   

Fuentes consultadas:

viernes, 26 de octubre de 2018

Musiclicando 143: Ciro y los Persas “Dice”


Esta semana Musiclicando os presenta a los argentinos de Ciro y Los Persas, un grupo de rock argentino que el próximo mes de noviembre participará en 2 festivales de rock importantes en Sudamérica. El primero será el Montevideo Rock 2018, cuyo cartel incluye nombres populares de la música uruguaya, como El Cuarteto de Nos (Musiclicando 18), Buenos Muchachos (Musiclicando 126) y La Triple Nelson, además de los brasileños de Titãs y el argentino Fito Paez. El segundo gran evento será el primer Cosquín Rock de Paraguay, donde tocarán al lado de los uruguayos de La Vela Puerca (Musiclicando 96), de los argentinos de Las Pelotas y de Skay y los Farikes, así como también grupos locales de la talla de Revolber y Kchiporros.

La banda surgió en el año de 2009 tras la disolución del grupo de rock argentino Los Piojos. Su líder, cantante y compositor Andrés “Ciro” Martínez (voz) se unió a Juan Manuel Gigena Ábalos (guitarra) para formar Los Persas. Los demás músicos que se involucraron en este proyecto, ya habían tenido proyectos musicales previos: João Marcos Cezar “Broder” Bastos (guitarra), Julián “Lulo” Isod (batería), Miguel “Chucky” de Ipola (teclados, quien también ya había tocado en Los Piojos) y Juan José Gaspari (guitarra), pero debutaron con su primer trabajo fonográfico, Espejos, en 2010. Además de ser galardonado con el doble platino de ventas, su gira fue exitosa y culminó con una petición de Paul McCartney para que fuesen teloneros de sus tres presentaciones en Buenos Aires.

El 2011, dos de sus integrantes dejaron la banda: Miguel, quien fue sustituido por Nicolás Raffetta (teclados), del mismo modo que Juan José fue remplazado por Rodrigo Pérez (guitarra), el cual ya había sido ayudante de Los Piojos. El segundo álbum, 27, salió en 2012 –su nombre proviene del hecho de que Ciro lo consideraba como su número de la suerte. En 2015 se editó el primer disco en vivo, Qué placer verte otra vez. Ya, en 2016, se produjo el lanzamiento de su tercer disco de estudio, Naranja Persa, que estaba compuesto por un doble disco que se estrenaría tan solo 2 años después.

Ciro ha declarado recientemente que “siempre compuso y cantó según sus gustos y no siguiendo la moda. 'Hay cosas que suenan, que gustan y uno toma elementos'”. Sus composiciones son de rock, de baladas e incluso de folk.

La canción que elegimos para nuestros lectores es “Dice”, del álbum Naranja Persa 2, de 2018, y cuyo videoclip ha sido estrenado esta semana en las plataformas digitales. El conflicto del amor es la temática de esta balada, que seguramente será cantada en los próximos conciertos de la gira, la cual terminará este año en el estadio del River Plate en un concierto con capacidad para 65 mil personas.

¡Esperamos que la aprovechéis!

Dúo Calavera
(Adaptado de diversas fuentes)



"Dice”

Dice que siempre tengo una excusa
Dice, y de provocar me acusa,
Que no ayudo a evitar
La locura que nos lleva a este ritual.

Dice que mejor sería perderse
Dice, en lo gris y ya no verse,
Y que todo ese color
Nuestro idioma, todo eso, ya pasó.

Oh, casi no vengo hoy
Casi no vengo hoy 
y aquí me ves.

Dice que no puede hacer su vida
Digo, yo no puedo hacer la mía,
Dice que esto no es amor
Que es un vicio que devora la razón.

Sé que no debería tentarte ni empezar
Sé que no debería buscarte nunca más,
Pero aunque quiera olvidarte
Algo me obliga a buscarte aquí afuera ya estoy.

Oh, casi no vengo hoy
Casi no vengo hoy
y aquí me ves.

Oh, casi no vengo hoy
Casi no vengo hoy
y aquí me ves.

Oh, casi no vengo hoy
Casi no vengo hoy
y aquí me ves.

Dice.
Dice.

miércoles, 24 de octubre de 2018

"Catón el Viejo: Un político incorruptible"


Marco Porcio Prisco nació en el año 234 a. C. en Túsculo, una ciudad del Lacio, que se había convertido en aliada de Roma dos siglos antes. "Porcio era un labriego fornido, trabajador y con grandes dotes para la oratoria. Debido precisamente a su don de la palabra y a los pleitos en que empezó a defender a sus paisanos, estos olvidaron su apellido Prisco y comenzaron a llamarlo Cato o Catón, que significa 'sabio'".

Catón era vecino de un noble romano, Marcio Curio, a quien decidió imitar en todo. "Siendo joven, Catón se unió al ejército y en 209 a. C. participó en la conquista de Tarento, antigua colonia griega en el sur de Italia. Fue entonces cuando entró en contacto con la filosofía helénica". Algo más tarde, otro vecino suyo, Valerio Flaco, admirado de su austero modo de vida, le propuso que se trasladase a Roma con él para iniciarse en la vida pública.

Así fue como Catón emprendió el Cursus honorum, la carrera de honores propia de los ciudadanos romanos. Tras actuar como abogado en el Foro, fue elegido primer tribuno militar y, poco después, cuestor. Entre tanto, en el ejercicio de estos dos cargos intervino en la guerra contra Cartago.

En la imagen, el templo de Saturno, sede del Tesoro, en el Foro de Roma

Tras su cuestura, 
Catón ingresó en el Senado. En el año 199 a. C. fue elegido edil plebeyo y, dos años después, también fue gobernador en Cerdeña. En estos años se labró una reputación de gobernante honrado, ya que jamás tocó una moneda que perteneciera a la República, pero también obtuvo una gran fama como orador, lo que le valió el apodo de “Demóstenes romano”. Catón era conocido en toda la ciudad por su afición al ahorro, rayando incluso en la tacañería, pero también se conocía su gusto por la comida y los vestidos sencillos, sin ostentación. Asimismo, destacó como hombre de negocios, dedicado a empresas de transportes marítimos y a campos de cultivo.

"Tras su exitoso gobierno de Cerdeña, en el año 195 a. C. Catón fue elegido para la más alta magistratura romana: El consulado. Su colega en el cargo fue su citado amigo y vecino, Valerio Flaco. Sofocó una sublevación en la Hispania Citerior, de donde regresó a Roma en el 193 a. C. con un enorme botín procedente, sobre todo, de la venta de los sometidos. El botín conseguido por Catón fue a parar de manera íntegra al erario público, salvo una cuantiosa recompensa que otorgó a sus soldados. Él, en cambio, no tomó nada para sí; de hecho, a su querido caballo, con el que había conseguido tantas victorias, lo dejó en Hispania para no encarecer el transporte de vuelta a Roma".

Coraza cartaginesa de bronce
Una vez en la capital, en vez de dedicarse al ocio que tanto su carrera política como militar le aseguraban, decidió volver a empezar y se ofreció como simple oficial a otros generales y gobernadores provinciales. "Así, acompañó como tribuno militar al cónsul Manio Acilio Glabrio a Grecia para luchar contra Antíoco III de Siria, que había invadido la región y soliviantado a las ciudades griegas contra Roma. Tras contribuir de manera decisiva para la victoria de Acilio en la batalla de las Termópilas, en el año 191 a. C., liderando en persona la carga contra la retaguardia griega, Catón regresó a Roma.

Por consiguiente, a la edad de 44 años, Catón dio por finalizada su carrera militar, pero no se apagaron sus ambiciones políticas. Al contrario, su aspiración se dirigió hacia uno de los cargos más prestigiosos de la República: el de censor. En pocas palabras, "un censor era el encargado de elaborar el registro de los ciudadanos romanos, decidiendo quién podía ser considerado como tal y también quién tenía derecho a ser senador y caballero. Esto le daba potestad de expulsar a quienes no se ajustaban a las virtudes exigidas en dichos órdenes. Los censores se convirtieron, por lo tanto, en una especie de policía moral que era muy respetada por los romanos".


El interés de Catón por este cargo se explica por su decidido propósito de restablecer en Roma lo que consideraba como la auténtica moral romana. "Consideraba la higiene personal y la costumbre de afeitarse como una forma de afeminamiento y, por ello, quiso poner de moda las túnicas de lana raídas y las barbas descuidadas. También lanzó resonantes acusaciones de corrupción contra destacados miembros de la élite romana. Denunció a su antiguo jefe militar, Acilo Glabro, por haber aceptado sobornos y, poco después, a Escipión Asiático, por haber aceptado dinero de Antíoco. Estas actuaciones acrecentaron su popularidad, hasta que en 184 a. C. fue, al fin, nombrado censor".

Durante el ejercicio de su cargo, Catón consiguió "revisar las listas de senadores y caballeros, aprobó medidas contra los publicanos (los recaudadores de impuestos, a los que el pueblo odiaba por su codicia) y decretó duros impuestos sobre la compra de los artículos que consideraba de lujo, como vestidos, carruajes o vajillas. Durante años se le vio yendo y viniendo por el Foro, defendiendo causas, apoyando reformas, intentando volver a la supuesta severidad de los antepasados. En todos esos tejemanejes, sus dichos graciosos se hicieron famosos, y con el tiempo se llegó a formar una colección de ellos, los conocidos como Dichos de Catón".

No obstante, en su vida personal Catón no estuvo siempre a la altura de lo que exigía a los demás o, al menos, así se lo reprocharon. "Habiendo enviudado de su mujer y teniendo ya un hijo crecido, empezó un romance con una doncella que no solo era mucho más joven que él sino que también era la hija de uno de sus libertos, algo poco apropiado para un excónsul y excensor. Cuando esta historia se supo en Roma, Catón se casó con la muchacha y tuvo otro hijo".


Ni siquiera cuando ya era un octogenario dejó Catón de actuar como autoridad moral ante sus conciudadanos y de advertirles sobre los peligros del contacto con el extranjero. "Catón fue enemigo de la cultura así como de las costumbres griegas, que consideraba depravadas y nocivas, al punto de debilitar a los romanos. En el año 155 a. C. hizo que expulsaran de Roma a los embajadores de Atenas por la mala influencia que ejercían. En el 157 a. C. fue enviado a África para arbitrar entre los miembros de las tribus cartaginenses y númidas. Durante esta visita se obsesionó con la idea de que la ciudad de Cartago, a la que repugnaba tanto por su lujo como por su riqueza y que había despertado su xenofobia, era una amenaza para Roma".

El punto de vista de Catón era suscrito por buena parte de los romanos. "Roma odiaba a Cartago, pero Cartago también odiaba a Roma como jamás en toda la Historia dos naciones se habían odiado. Los ciudadanos de ambas urbes, dueñas de extensos territorios más allá de sus muros, creían con firmeza que merecía la pena que su ciudad se hundiera en el infierno si conseguía arrastrar a la otra con ellos. No había rivalidad o enemistad. Había un odio irracional cuyos ecos aún resuenan tras más de 2000 años".


Hasta el día de su muerte, finalizó todos sus discursos con las conocidas palabras: “Cartago delenda est” (Cartago  debe ser destruida). "Esta famosa locución latinano hacía más que reflejar esa voluntad no solo de vencer, sino también de llevar la victoria hasta el extremo de que no quedara ni la más mínima posibilidad de recuperación del antagónico enemigo romano. En la actualidad, esta expresión se utiliza para hablar de una idea fija que se persigue sin descanso hasta que se realiza".

En el año de su fallecimiento, y en gran parte debido a su influencia, comenzó la tercera Guerra Púnica entre Cartago y Roma. Tres años después, Cartago fue arrasada con una minuciosidad tal que los arqueólogos solo han conseguido encontrar pequeños restos de lo que antaño fuera la mayor y más rica ciudad del Mediterráneo. Los magníficos edificios fueron primero incendiados, luego demolidos y, para finalizar, sus cimientos fueron arrancados. El páramo en el que los romanos convirtieron Cartago fue sembrado con sal para que nada volviera a crecer allí y fue determinado que cualquier resto, de aquella esplendorosa cultura cartaginesa, fuese exterminado.

Catón fue el primero en escribir una Historia de Roma en prosa, Orígenes, de la cual tan solo quedan unos fragmentos. Su obra De Agricultura, un tratado sobre la misma, es la primera obra completa de prosa en latín. Todos sus escritos los realizó en latín, por lo que es considerado el padre de la lengua latina.



A fin de cuentas
Catón el Viejo dejó fama de hombre de moral estricta e intachable. En palabras del historiador griego Plutarco, "los que eran reprendidos por alguna causa respondían que no eran Catones, es decir, que no eran perfectos". Según el Diccionario de la Real Academia Española, ser un “catón”, es sinónimo de "ser un censor severo, alguien que critica o censura los comportamientos de otras personas que considera inmorales"Sin embargo, pocas de las medidas apoyadas por Catón para disciplinar a los romanos pervivieron mucho tiempo. Un siglo después, en plena crisis de la República, su figura de patriota inflexible se recordaba con nostalgia, como un hombre perteneciente a otra época.

Pepe Cocodrilo



Consultas bibliográficas y citas:
http://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/970/Caton%20el%20Viejo
https://pt.slideshare.net/francimanz/historiografia-romana-59135885?nomobile=true
http://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/970/Caton%20el%20Viejo

lunes, 22 de octubre de 2018

Entrevista a David Sánchez Florio: "Reflexiones en torno a su obra (Parte II)"

El Blog Correveidile presenta la segunda parte de la entrevista. 
Si os habéis perdido la primera, 
todavía estáis a tiempo, aquí está.



Blog Correveidile: Vamos a hablar ahora sobre tu libro, titulado Diferente. ¿Por qué mezclaste animales y personas en tu novela? ¿Y qué te llevó a elegir a una chica como protagonista?
David Sánchez Florio: Esta pregunta es muy interesante. Cuando escribes, tienes la oportunidad de poder plasmar algo que quieres expresar. En mi caso, elegí a un cerdo porque es un animal que se come. Aquí en España se dice que del cerdo se aprovecha todo, hasta los andares, es decir, que se come todo. Pero como soy vegetariano, cuando veo a un cerdo, veo un animal, no un producto para comer.
En un principio, la novela Diferente iba a ser simplemente un cuento que transmitiese mi punto de vista con respecto a los animales que tienen sentimientos, que cuando se les hace daño, por ejemplo si un perro recibe una patada, el perro ladra, ya que si no tuviese sentimiento, no le pasaría eso al animal, no sentiría dolor. En fin, así que escogí a un cerdito para expresar mi punto de vista sobre la vida. En el caso del personaje de Susana, que es la niña por la que me preguntáis, surgió también de una forma muy inocente.
Diferente es una novela que tiene sorpresas, sobre todo, de cara al final. Tiene lo que aquí llamamos un “bombazo”. Susana es un personaje muy, muy interesante, en verdad, ella es la protagonista y Diferente, el cerdo, es el coprotagonista, el que cuenta la historia. Por eso, es igual a un protagonista porque, al final la historia está contada por él. Susana y el cerdo son dos personajes necesarios para la historia que quiero contarle al lector. 

BC: Tú escribes sobre amor y desamor con la misma fuerza. ¿Qué es el amor para ti? ¿Escribes sobre este sentimiento porque es una práctica literaria o por tu estado de ánimo?
DSF: El amor, para mí, solo es uno. Solo existe un amor, a pesar de que lo podamos encasillar de diferentes maneras. Voy a poner un ejemplo, si amor fuera un color, sería un color determinado. Imaginemos que el amor es blanco puro, un blanco deslumbrante. Si hablamos de blanco perla, sería levemente diferente del blanco inicial. Entonces, si hablo de amor estoy refiriéndome al sentimiento en estado puro. El amor en pareja o familia está muy determinado por el egoísmo. El egoísmo en el buen sentido, no en el malo. Mis amigos, mis hermanos, mis padres... son personas a las que quiero y les doy amor.
Pero hablemos del amor entre parejas. Si mi pareja deja de quererme porque, por ventura, ha encontrado a otra persona, tengo que alegrarme -si le amo-, porque será feliz. Tengo que amarme a mí. Si me amo, no puedo permitirme estar mal. Porque estar mal es una forma de no amarse a uno mismo. Cuando hablo de amor universal, me estoy refiriendo a la clase de amor que está por encima de lo que se llama “gran amor”. Lo que las personas llaman “gran amor”, yo lo llamo “querer”. Si me digo: “Quiero a mis padres y deseo que tengan todo el tiempo posible a mi lado en este mundo”. Estoy diciendo que los amo, pero no tienen que estar todo el tiempo aquí, a mi lado; pueden partir en cualquier momento, van a seguir para otros planos, donde van a descansar de este mundo que tiene tantas trabas.
Diferente habla de este tipo de amor que no puede tener trabas, que es blanco puro, si fuera un color. Cuando hablo de desamor (hablo de desamor en otro de mis libros, de poemas, que se titula Escucha tiempo), hablo de amor entre parejas, el amor del querer, ¡Te quiero!, pero bajo juicio, bajo egoísmo. Escucha Tiempo aborda un apartado de amor y otro de desamor, de pesimismo y dedicatorias. Así que, comentando la pregunta sobre el amor y desamor, escribo porque esos sentimientos los experimentan las personas algunas veces o una vez al menos, a lo largo de la vida. Un escritor expresa lo que siente o si ha sido tocado por una persona con la que se identifica. Cuando un escritor escribe, escribe para que otras personas también se sientan identificadas con sus textos, pensamientos y sentimientos. Por esta razón escribo sobre amor o desamor.


DSF: Pues, a ver, voy a hablar de mí. Siempre estoy generalizando, pero bueno es que pienso que nos pasa a todos lo mismo. Lo gratificante para mí, como escritor, es cuando recibo mensajes de mis lectores. Precisamente hace poco, una chica recibió Diferente por correo, creo que le llegó un martes y el miércoles ya se había leído el libro. Me escribió y me contó que estaba pasando una mala racha, que sus amistades la habían dejado de lado y que no sabía por qué, pero sentía que todo el mundo la había dejado de lado. Bueno, el caso es que cuando terminó de leer Diferente me escribió contándome que algo había cambiado dentro de ella y que, a pesar del frío que hacía, iba a salir a dar un paseo sola, a disfrutarse y a estar consigo misma. 
Al día siguiente me volvió a escribir y me comentó: “No es por regalarte el ojo o por hacerte la pelota, pero siento que, desde que me leí el libro, algo ha cambiado dentro de mí, ha pasado algo y veo un nuevo momento y que sí, que hay camino para seguir”. Y eso es muy gratificante, es superbonito que te lo digan. Bueno, pues, con Diferente he recibido muchísimos mensajes de este tipo. Ahora con Instagram, me estoy dando cuenta, poco a poco, de este tipo de cosas. Diferente ya ha cumplido cinco años... y sigo recogiendo alegrías.

BC: ¿Cuál de tus obras te enorgullece más?
DSF: Esta pregunta es muy difícil, porque es como preguntarle a una madre o a un padre a qué hijo quiere más. Entonces, lo que sí puedes es decir qué cualidad de tus hijos resaltarías… Por ejemplo, la obra Diferente, la adoro porque es como un libro de Disney, en el sentido de que es para todos los públicos, hay gente que lo ha leído y se ha quedado encantado. Hay gente que ha descubierto los mensajes de profundidad espiritual, filosófico o reflexivo, como los quieran llamar. Así que, Diferente, me encanta. Tengo muchas obras que todavía no han visto la luz, pero la verán, si Dios quiere.
Aun así, os cuento que  tengo una novela que llevo escribiendo media vida, esa la empecé a los 13 años. Los primeros capítulos eran una recopilación de algo que había escrito con anterioridad. Esa novela es pasión, es adoración lo que siento por ella, la adoro. En Instagram, me puse un seudónimo, @buracnam, que es el nombre del protagonista de la siguiente novela que pretendo publicar. Se trata de historias profundas, muy emotivas y apasionantes. Sí, pienso que la gente va a identificarse con muchas de las cosas que cuento allí. Así que me encantan mis novelas, estoy muy orgulloso de ellas, mucho, ¡muchísimo!

No te pierdas la última entrega... ¡En breve!


Cervantitos