Durante la limpieza que realicé en una
carpeta en la que guardo los textos de esta columna y otros ocasionales, encontré
esta pequeña entrevista sobre el Quijote,
en la que el mundo de hoy entró más amenazador que el gigante Briareu, aquel de
cien brazos, sin embargo no tengo ni idea de quién la hizo. Con todo, sospecho
que haya sido un(a) periodista del sitio web o del periódico de la Librería
Cultura de São Paulo. Solo sé que es de mayo de 2013, y que, a lo mejor, no debería
irse a la basura.
Te
has dedicado dos años a la traducción del Quijote
con el objetivo de aproximar la obra a las nuevas generaciones. ¿Qué es lo que
te encanta en la narrativa construida por Cervantes?
El
Quijote es profundo y divertido. Enfrenta un gran
problema, el descompás entre nuestros deseos y la dicha realidad, pero con una
gracia y fluidez extraordinarias. Más de cuatrocientos años después, sigue siendo
profundo y divertido. Eso, me parece, debería ser la meta de todo escritor. Así
que, como traductor, mi objetivo no fue acercar la novela a las nuevas
generaciones, sino más bien intentar mantener esta gracia y fluidez en
portugués. No hay nada de extraordinario en eso – forma parte del trabajo de
cualquier traductor. Ahora bien, si sirve para que algunos jóvenes lean a Cervantes,
es lucro.
¿Y
qué aspectos de la obra destacarías como importantes/relevantes que sean conocidos
por las nuevas generaciones?
¡Son tantos! Si tengo que
elegir uno, allá va: todos nosotros, un poco más o un poco menos, somos don
Quijote y Sancho Panza y otros personajes de Cervantes. Es decir, si te
embarcas en la aventura del Quijote, te
vas a reconocer en cualquier página y te vas a emocionar. Eso es insustituible.
Cuando
nos encontramos “cara a cara” con la figura de don Quijote, nos lleva a
cuestionarnos sobre la tenue frontera entre la realidad y la utopía. A don
Quijote no es raro que se lo tome por loco, sin embargo su personaje nos ofrece
la real – y divertida – dimensión de la acción humana sobre la realidad,
incluso en el sentido de (re)construcción de la misma. ¿Cómo evalúas esas
discusiones en torno al personaje don Quijote?
Don Quijote actúa menos
sobre la realidad que sobre lo que él piensa y desea que sea la realidad. Pero,
¿no es eso lo que todos hacemos? Para cada uno de nosotros, la realidad es lo
que nuestros prejuicios, emociones, fe, inteligencia o la falta de ella y
nuestros sentidos nos proporcionan. Como en el caso del Quijote, la realidad nos cobra la diferencia, muchas veces de manera
cruel. No hay una percepción cien por cien objetiva de lo real. Cervantes, al
exagerar la manía caballeresca de don Quijote, en la que veía un castillo en
cualquier venta y una hermosa doncella en cualquier mujer, solo ilustra con
rasgos fuertes un problema que nos concierne a todos. Es por esto que muchos
lectores del Quijote se ríen y lloran
al mismo tiempo, como Virginia Woolf.
En
tu opinión, ¿por qué hay cierta dificultad, por parte de algunas personas y de
algunos críticos, en tomar en serio la figura de don Quijote?
Mucha gente confunde pesadez
con profundidad. Piensa que si es gracioso, si es divertido, no puede ser serio.
Esto no es de hoy. El propio Aristóteles hablaba mal de las comedias. Como
decía Mário Quintana, hablando de Oscar Wilde, el crimen que nunca le
perdonaron fue que él era profundo sin ser pesado.
En
el mundo de hoy, ¿hay espacio para vivir con utopía? Si es así, ¿cuál es la
importancia de cultivar la utopía?
Las utopías andan mal vistas,
últimamente, ante tantos sueños políticos que se volvieron pesadillas o se desmantelaron.
Pero en el momento en el que desistamos de soñar, de intentar ser mejores, más
justos, podemos volver a caminar a cuatro patas y subir de nuevo a los
árboles.
Ernani
Ssó
Traducción
de Mei Santana
Realmente, Ernani, esta entrevista ha merecido la pena salvarla del escrutinio llevado a cabo en ese cajón de tus papeles. Gracias por compartirla con nosotros tan generosamente. Un beso en la distancia,
ResponderEliminarFico até sem jeito. Vocês estão me mimando demais. Eu é quem agradeço o espaço.
ResponderEliminarErnani, tú sabes que lo mereces. A fin de cuentas, !eres el traductor del Quijote! Eso siempre son palabras mayores. Un beso de todo el equipo del Blog,
EliminarMe encantó la entrevista. Felicitaciones!!!
ResponderEliminarCuando se habla de Quijote, se habla de aventuras, amor y pasión.
ResponderEliminarFelicidades a todos!
¡Entrevista genial! ¡Me encantó leerla!
ResponderEliminar¡Gracias por compartirla con nosotros!