Pregunte a la Duquesa: FIB

Hola mis queridos Correveidileanos:

Para la sección de este mes, he elegido tratar de un tema sobre el que, por lo menos una vez en la vida, todos nos hemos parado a reflexionar: La felicidad. Muchos piensan que la vida de la nobleza es sinónimo de eso. Sin embargo, no faltan historias de nobles infelices que demuestran lo contrario.

En realidad, lo que me pareció más curioso y que me gustaría compartir con vosotros es que hay incluso un índice llamado FIB (Felicidad Interna Bruta) que fue desarrollado específicamente para analizar cuáles son los aspectos responsables por traernos esta sensación de plenitud que suele ser llamada “felicidad”. 

Aunque os parezca raro, es fundamental decir que el FIB fue creado por un noble, como yo, de quien, claro, ¡he sido muy amiga! Sí, el rey butanés Jigme Singya Wangchuck es el responsable por el surgimiento de este índice en 1972, de manera que, con el soporte del PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo), el concepto derivado de tal indicador empezó a ser colocado en práctica. No tardó mucho para que otros países se interesaran por este tema, sobre todo ante su originalidad a la hora de medir el progreso en una comunidad o nación.

El hecho más importante de la creación del FIB es la invitación que este ofrece a todos para que se mire más allá del desarrollo económico al analizarse un país, proponiendo un estudio también del medio ambiente y de la calidad de vida de las personas. Eso porque se parte de la premisa de que el objetivo principal de una sociedad no puede ser solamente el crecimiento económico, debe ser también la integración del desarrollo material con el psicológico, cultural y espiritual, todos en armonía con el planeta.

Por lo tanto, tal indicador propone nueve dimensiones que deben ser siempre consideradas:

1. Bienestar psicológico: en este aspecto son evaluados el grado de optimismo y satisfacción de cada persona con respecto a su propia vida. Igualmente, son evaluadas las tasas de emociones, tanto positivas como negativas, entre ellas la autoestima, la sensación de competencia, de estrés y las actividades espirituales.

2. Salud: en este tema se verifica la eficacia de las políticas de salud, por medio de una autoevaluación de esta, además de los niveles de  invalidez, patrones de comportamiento de riesgo, ejercicio, sueño y nutrición. 

3. El uso del tiempo: está considerado como uno de los factores más significativos en la calidad de vida, en especial en cuanto al tiempo de disfrute y para estar con la familia. Son considerados en este aspecto el tiempo en el tráfico,  el trabajo y las actividades educacionales.

4. Vitalidad comunitaria: en este tema se verifica la confianza y la sensación de pertenencia, la vitalidad de las relaciones afectivas, la seguridad tanto en el hogar como en la comunidad, así como la práctica de la donación y del voluntariado.

5. Educación: aquí son consideradas cuestiones como la participación en la educación formal e informal, las competencias, los cuidados de los padres con la educación de los hijos, los valores educativos, la educación ambiental, etc.

6. Cultura: en este aspecto son evaluadas tradiciones locales, festivales, valores nucleares, participación en eventos culturales, oportunidades de desarrollar capacidades artísticas y la discriminación por razones religiosas, raciales o de género.

7. Medio ambiente: en este factor se mide la percepción de los ciudadanos en cuanto a la calidad del agua, del aire, del suelo y de la biodiversidad. Estos indicadores incluyen el acceso a áreas verdes, sistemas de colecta de basura, etc.

8. Gobernanza: en este tema se evalúa cómo la población ve el gobierno, la prensa, el Poder Judicial, el sistema electoral o la seguridad pública en términos de responsabilidad, honestidad y transparencia. También son analizados la ciudadanía y el compromiso de los ciudadanos con las decisiones y los procesos políticos.

9. El patrón de vida: por fin, se analizan la renta individual y familiar, la seguridad financiera, el nivel de deuda, la calidad de las viviendas, etc.

A nivel particular, me parece que estos temas propuestos por mi amigo butanés nos invitan a una excelente reflexión sobre cómo estamos conduciendo nuestras vidas, ¿no? Independientemente de dónde vivamos – Brasil, España, México,… - o de los índices de los países, ¡es una invitación para cambiar lo que no nos gusta en nuestras vidas!

Como siempre, espero haberos entretenido, mis queridos lectores.

La Duquesa

Referencia bibliográfica: FIB