jueves, 10 de diciembre de 2015

Breve testimonio de un andaluz

Estos días tuve la oportunidad de hablar un ratito con mi vecino, Francisco "Paco" Rivera. Un español andaluz casi septuagenario, aún lleno de vivacidad, que vive en Brasil desde niño. Muy simpático, habló conmigo un poquito sobre su vida.



¿De dónde viene?
Yo vengo de Villanueva del Trabuco, provincia de Málaga, sur de España, o sea, Andalucía.

¿Entonces tiene acento andaluz?
No, porque lo que pasa es lo siguiente, como yo vine chiquitito para acá, aprendí a hablar más castellano aquí en Brasil que en España.

¿Cuántos años tenía cuando usted llegó aquí?
Siete años.

¿Aprendió la lengua con sus padres?
Aprendí con los amigos. Porque estaba prohibido cuando yo estaba en la escuela, se nos prohibía hablar castellano aquí en Brasil porque si no, la persona no aprendía el portugués. Entonces lo aprendí después.

Entonces ya hace mucho tiempo que vive en Brasil.
Si, desde 1953.

¿Usted ha vuelto a España alguna vez?
Sí, yo volví a España dos veces.

¿Aún tiene familia que viva allá?
No mucha [esboza una sonrisa llena de ironía]. Tengo cuarenta y ocho primos. ¡Es que mi familia era muy grande!

¿Y solo vinieron a Brasil sus padres?
Sí, han venido a Brasil solo mis padres.

¿Sabe por qué ellos vinieron para acá?
Digamos… son cosas… extrañas. Mis padres… Como hubo la guerra… Entonces mi madre, ella era más o menos joven, y mi padre era un sargento de la mili. Y mi abuelo, por un lado pertenecía al lado de Franco, porque allí, digamos, las personas decían, digamos, de qué lado se quedaban. Entonces, digamos, mi abuela escribía para un tío, que estaba en el frente de Madrid, y para mi padre. Mi padre estaba del lado del Franco y el otro [el tío, el hermano del padre], de la República. Después pasaron una serie de cosas y cambiaron de país.

¿Le gusta vivir aquí?
Lo que pasa, digamos, no es que me gusta, es que estoy aquí y no hay otra forma de volver. Pero yo volví ahora de España, el día primero de octubre, las cosas están un poquito difícil allá, pero no tan difícil como aquí.


Sissi

3 comentarios:

  1. Enhorabuena, Carolina. Como ya relató Gonzalo Santonja en su entrevista, no es fácil para un emigrante adaptarse... algunos lo logran, en cambio otros no!! Son múltiples los factores que influyen y, en ocasiones, las necesidades superan las voluntades. Excelente trabajo, con un relato vivo de las huellas todavía presentes de la Guerra Civil Española y cómo eso afectó tan directamente a las familias españolas.

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  2. Muy interesante la parte donde el habla sobre la família una parte de un bando y la otra del otro bando.
    Me recuerda muchas cosas tanto personales cuanto de mís estudios sobre la historia de España.
    La guerra e tan cruel que siemmpre hace uno pensar que hay ''un bando´´ bueno y otro malo.
    Pero al fin lo que hace una guerra civil (que es la peor de todas las guerras) es la división en las familias: el hermano que mata el otro hermano, el vecino que mata el vecino ....o sea es el total derrumbe de los mas elementares sentimientos de humanidad.
    Ah pero eso ocurre en todas la guerras no? Si, pero en una guerra civil es aún peor.
    Cuando niño en Ruanda vivi el masacre de 94 y allá teniamos eso: los mas cercanos a ti de un momento al otro te matan...

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  3. También hay una cosa importante: muchos hablan de la paz. Si pero se olvidan en como construir la paz. La paz se contruie con la educacion de los mas elementares valores dede nino. Todavia uno se olvida que la paz nasce la justicia. Sin una justicia social, siempre van a ocurrir guerras (como fue la guerra civil española que nascio como una disputa social desde el principio)
    Si trabajamos la paz de una manera primaria tendremos una paz fragil. Si no hay un amplio trabajo de justicia, de egalidad entre todos, la paz siempre ser´´a temporária

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