Ismael y la audacia de protagonizar su propia historia

Llamadme Ismael. Hace unos años – no importa cuánto hace exactamente – teniendo poco o ningún dinero en el bolsillo, y nada en particular que me interesara en tierra, pensé que me iría a navegar un poco por ahí, para ver la parte acuática del mundo.

Moby Dick, Capítulo I

La película retrata a Ismael, un niño de ocho años que viaja de Madrid a Barcelona, solo y sin el conocimiento de su madre, Alika, para intentar conocer a su padre, Félix. En esta aventura, el niño va a conocer también a su abuela, Norma, la madre de Félix. 

Ismael lleva siempre en el pecho una chapa en la que se puede leer la frase en latín: sappere aude, que significa "atrévete a saber" y representa mucho de la filosofía de vida de esta película.

Siempre que Ismael le preguntaba a su madre sobre su padre, ella no le hacía mucho caso: con eso, creía que lo protegía de algo para lo que el niño no estaba todavía listo para saber. Así que le cupo a Ismael la osadía e iniciativa de enfrentar lo desconocido y seguir adelante en la búsqueda de su padre. 

Una vez en Cataluña, ya cuando Ismael encuentra a su abuela y luego a su padre, se nota que Norma y Félix viven aislados el uno del otro y, aunque son madre e hijo, hace mucho tiempo que ni tan siquiera se hablan. Una vez más, le tocará a Ismael ser el agente provocador del cambio, del encuentro y del diálogo.

Película: Ismael (España, 2013)

Blackmore