viernes, 19 de febrero de 2016

Svetlana Alexiévich: la Nobel de Literatura que dio voz a la catástrofe y al amor


La escritora bielorrusa en su discurso en Estocolmo

La escritora bielorrusa Svetlana Alexiévich es la primera periodista en ganar el Premio Nobel de Literatura (2015) por su obra totalmente centrada en el periodismo literario, la cual refleja las catástrofes soviéticas y postsoviéticas con gran destaque al descaso, al valor, al dolor y al amor.

Según la portavoz de la Academia Sueca, Sara Danius, que fue la encargada de dar a conocer a la ganadora, “El premio fue otorgado a la bielorrusa de 67 años porque su obra polifónica es un monumento al valor y al sufrimiento de nuestro tiempo” y luego añadió “hace más de medio siglo que un escritor de no ficción no gana el Nobel”.

Momento de la entrega del Premio Nobel de Literatura 2015
Svetlana se graduó en periodismo en la Universidad de Minsk, Bielorrusia, en 1972 y trabajó durante varios años como periodista escribiendo ensayos, cuentos y reportajes a través de su propio género literario, donde los narradores son las propias víctimas, o sea, aquellos que no tienen derechos ante los desastres y que son los testigos de una tragedia que los lleva, en directo, a la tumba.

Su primer libro La guerra no tiene rostro de mujer fue publicado en 1985 y está basado en entrevistas de cientos de mujeres que participaron en la Segunda Guerra Mundial como pilotos, conductoras de tanques, ametralladoras, francotiradoras, etc. Estas mujeres fueron olvidadas después de la victoria de los hombres, pero ellas no se olvidaron de los horrores de la guerra. La obra fue aclamada por la crítica y por el público en general y vendió más de dos millones de ejemplares.

El segundo trabajo de la Nobel, Los últimos testigos, también fue publicado en 1985 y, así como el primero, tuvo innumerables reimpresiones y fue aclamado por los críticos. En este trabajo, la guerra es descrita a través de los ojos de los niños inocentes.

Para escribir su tercer libro Los chicos de zinc, publicado en 1989, la escritora recorrió su país durante cuatro años entrevistando a oficiales, soldados, madres y viudas de las víctimas que murieron en la guerra entre Afganistán y la Unión Soviética, que duró diez años, y que había sido ocultada al pueblo. Según datos encontrados en la biografía de la autora en su página web oficial, este libro fue un bombazo, pues desmitificó la guerra. Los militares comunistas atacaron a Svetlana y la procesaron judicialmente en la ciudad de Minsk, sin embargo, el público se levantó en defensa del libro y el caso fue cerrado. Cabe señalar que, más tarde, varios documentales y obras de teatro se basaron en este libro.

El único libro traducido al español, Voces de Chernóbil: crónica del futuro, fue publicado en el país de la autora en 1997, aunque tan solo sería lanzado en España en enero de 2015 por la editorial Debate, que tiene los derechos de todas las obras en español, y, al contrario de lo que se piensa, esta obra no trata tanto sobre el desastre, sino del mundo que hay tras él, de cómo la gente se adaptó a una realidad parecida a una guerra nuclear.

Con ocasión de su 50 cumpleaños, fue publicada una colección de dos volúmenes con la introducción del crítico Lev Annisnky que afirmaba: “Esta es una obra única, que probablemente ha sido llevada a cabo por primera vez en Rusia, o más bien en la cultura soviética y postsoviética. La autora ha rastreado y registrado las vidas de varias generaciones del pueblo soviético. Esta es una historia viva contada por el propio pueblo y registrada por una cronista talentosa y honesta”.

Actualmente, Alexiévich está terminado un libro que trata del amor, donde hombres y mujeres de diferentes generaciones cuentan sus historias personales. “Se me ocurrió que he estado escribiendo libros sobre cómo la gente se mata entre sí, pero esta no es la totalidad de la vida humana. Ahora estoy escribiendo sobre cómo las personas se aman, y me hago una pregunta: ¿Quiénes somos? El amor es lo que nos trae a este mundo y yo quiero amar a las personas, aunque sea cada vez más difícil amarlas…cada vez más difícil…”.

Sin embargo, no es difícil para un lector sensibilizarse y amar cada uno de estos personajes, víctimas de los horrores de las guerras y del desprecio por la vida humana, así como tampoco es difícil admirar a esta escritora fuerte y verdadera que, tras crear su propio genero de escritura, ha tenido el valor suficiente como para abrir la historia de su pueblo y de su gente al mundo.

Cristiane Guerreiro
Bloguera Literaria

Fuentes consultadas:

6 comentarios:

  1. Cristiane, qué bonito post!! Sin duda, Svetlana ha sabido realzar el elemento más importante en su obra entre tanto sufrimiento humano: el amor cuyo valor es incalculable. Espero que sigas contando cosas tan interesantes... Felicitaciones.

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    1. Hola Alma! Estoy completamente enganchada a la obra de Svetlana y a su genero literario, así que pronto se verá algo más sobre la autora y sus libros publicados en nuetro blog. Saludos!

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  2. Marta Pérez Rodríguez19 de febrero de 2016, 0:40

    Siempre es un enorme placer ver que se premian actos humanitarios llevados a cabo a través de las Letras (con mayúsculas!!) y no meramente mercantilistas. Obvio que hay de todo, Svetlana es un ejemplo brillante. Ella nos deja una palabra preciosa, ESPERANZA, pero eso es, sin duda, porque hay AMOR. Gracias, Cris, un placer siempre leerte!!

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  3. Cristiane, adoro seu estilo de escrever. Belíssimo texto.
    Obrigada por compartilhar.

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    1. Obrigada pelas palavras Marcia. E aproveito para te agradecer, em nome de todos, por sua assídua participação em nosso Blog.

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