Der Spiegel

Imagínalo como una pintura de realismo absurdo, en constante movimiento y que solo retrata el tiempo presente.

Normalmente este aparato está hecho de vidrio llano y pulido en el que se deposita una película metálica al fondo, para que se vuelva reflexivo. No requiere alimentación eléctrica ni conexión a otros dispositivos, no se desgasta fácilmente y su tecnología es de conocimiento público hace siglos, evitando así los engorrosos pagos de licencias de utilización de patente. En general, no posee accesorios, aunque puede llevar un marco de madera de pino en alto relieve, pues así sirve mejor al propósito de adornar el salón de las nobles viviendas.

Los hay de los más variados tipos: de bolso, de pared y los retrovisores (estos últimos, curiosamente, retratan el presente que ha pasado). El coste depende solamente de su tamaño y de los adornos que uno quiera añadirle .

Su funcionamiento es muy sencillo: basta un poco de luz y que el usuario lo mire con los ojos bien abiertos. No importa lo que busques, lo que sueñes, lo que quieras ver: desgraciadamente, él siempre te dice la verdad, sin trampa ni cartón. Al tristón, le muestra lágrimas; al dichoso, una sonrisa; al escéptico, en fin, nada más que la realidad.

Para los narcisistas, es un irresistible objeto de deseo: ya se lo nota en los gimnasios, donde la gente lo mira enamorado, mientras se pone cachas, o entonces por las autofotos que las nenas postean en Facebook.

Algunas personas aseguran que al romperse, proporciona siete años de azar. Aunque no sea verdad, os aseguro que corta como una navaja de filo agudísimo.

¿Buscas la verdad? Cómprate ya un espejo, ¡es barato y no es embustero!

Meron Soda & Blackmore

[Este trabajo se encuadra en el marco de las actividades del módulo de ELE C2.2-2016. El punto de partida fue el cortometraje titulado "Book", en el que se presenta de un modo técnico un objeto tan usual como es un libro].