En su grafía original latina, las vulpes (zorras) dio
nombre a un grupo de punk rock femenino
de Baracaldo (Vizcaya,
España)
formado durante el verano de 1982. Sus influencias musicales iban desde el
rockabilly al
punk más básico (Sex Pistols, Ramones...), pasando por la adoración al héroe
de la clase obrera americana Bruce Springsteen.
Su intención como grupo era, básicamente, provocar, tanto con su
estética como con sus declaraciones y
letras comprometidas de sus 13 canciones.
La banda estaba constituida por: Loles Vázquez (guitarra), Mamen Rodrigo (voz), Begoña Astigarraga (bajo) y Lupe Vázquez (batería). Para realzar su carácter contestador adoptaron
la grafía errónea Vulpess, siendo que las dos eses
solo eran una referencia provocadora al anagrama de las "SS" nazis. Un buen ejemplo de su
filosofía es la declaración: “Nos gusta
ser como somos y pensamos que a nadie debe escandalizar que digamos que nos
masturbamos, porque eso es natural, eso lo hace todo el mundo. Es más fuerte
poner películas violentas u obligar a niños a seguir determinado tipo de
religión”.
Se hicieron famosas a partir del 23 de abril
de 1983
por aparecer interpretando la canción “Me gusta ser una zorra”, en el programa de
Televisión Española Caja
de Ritmos de Carlos Tena. El
programa se emitía en horario infantil y la actuación del grupo resultó un
escándalo. Eran años de cambio, final de la transición española, y Las
Vulpess armaron un gran
revuelo. Se creó una comisión “por una televisión digna”
por parte de amas de casa, padres, maestros, ancianos… y, finalmente, la Fiscalía General del Estado dictó una querella criminal
por escándalo público contra el programa. Incluso Carlos Tena tuvo
que dimitir y Televisión Española dejar de emitir Caja de Ritmos.
El tema por todos conocido, no era más que una
simplista revisión del “I wanna be your dog”
(Quiero ser tu perro) de los Stooges de Iggy Pop, una adaptación en
castellano con un alto contenido sexual, tratado sin tapujos y con un lenguaje
soez y obsceno. En “Inkisición”,
cara B del single, el grupo arremete contra la Iglesia
Católica y lo que ellas consideraban doble moral, con letra
igualmente provocadora.
Cuando salió este single lo hizo en loor de
multitudes, con una advertencia en la portada avisando de los peligros que la
ya popular canción podría causar en la sensibilidad del oyente. Su
contraportada mostraba, orgullosa, un collage realizado con los muchos recortes
de prensa que les propició el escándalo que, lejos de dañar al grupo, lo elevó
directamente a los altares de la historia del rock, convirtiendo a Las
Vulpess en una de las
leyendas más grandes del punk ibérico, pero esta misma fama desmedida pudo con
ellas y todo se desmoronó a la misma velocidad que se sucedieron los
acontecimientos, empezaron los roces personales y Las Vulpess dejaron de existir.
José Antônio
"Me gusta ser una
zorra"
Si tú me vienes
hablando de amor,
que dura la vida,
cual caballo me guía
permíteme que te
dé mi opinión.
Mira imbécil que te den por
culo.
Me gusta ser una zorra
me gusta ser una zorra
me gusta ser una zorra
Eh, oh, ah, ah.
¡Ay ay ay ay ay cabrón!
Prefiero masturbarme, yo sola
en mi cama,
antes que acostarme con quien
me hable del mañana.
Prefiero joder con ejecutivos,
que te dan la pasta y luego
vas al olvido.
Me gusta ser una zorra
me gusta ser una zorra
me gusta ser una zorra
Eh, oh, ah, ah
¡Ay ay ay ay ay cabrón!
Dejando ahora mi profesión,
te pido un deseo de corazón,
quiero meter un pico en la
polla
a un cerdo carroza llamado Lou
Reed.
Me gusta ser una zorra
me gusta ser una zorra
me gusta ser una zorra…
Creo que lo de las Vulpess ya lo definió Shakespeare con gran maestría: "Mucho ruido y pocas nueces". Tanto miedo que se tiene a veces por algo "nuevo", "diferente" o "rompedor"... y, al final, el miedo tan solo sirve para controlar o apagar voces que lo único que quieren es libertad del decir, del expresar y, cómo no, del sentir. La canción, personalmente, no me gusta, pero no la condeno, ni mucho menos la censuro. Todo debe ver la luz en igualdad de condiciones para formar parte de nuestra capacidad del "decir", del "elegir". Gracias José Antônio, arriesgada y valiente decisión. Por lo visto, la platea del blog enmudeció!!
ResponderEliminar