Fui una niña con mucha suerte, por tener a la familia siempre cerca...

Nací en 1990, cuando mi madre tenía solo diecisiete años; mis padres están divorciados desde mis dos años. Además, por parte de mi madre soy hija única, pero por parte de mi padre tengo tres hermanos más. Cuando tenía un año, mi familia y yo fuimos a Japón para trabajar, mi madre siempre trabajó fuera y mi abuela se quedaba conmigo todos los días. Mi abuela era una persona muy amable, paciente y fuerte, me enseñó muchas cosas importantes, como a leer, escribir y cocinar, hasta hoy me encanta cocinar.

Volví a Brasil en 1996 y enseguida empecé a estudiar en una escuela brasileña, aunque mi familia es brasileña, yo tenía un poco de la cultura japonesa, entonces era muy tímida y no hablaba con ningún niño, por eso fui a hacer teatro también y así me he acostumbrado con el modo brasileño. Yo tengo una prima con la misma edad que yo, nosotras estamos muy unidas y cuando éramos niñas vivíamos en la casa de mi abuela, siempre estábamos jugando en las calles. Mi abuela hacía una tarta de zanahoria con chocolate casi todas las tardes, era mi comida favorita. Fui una niña con mucha suerte, por tener a la familia siempre cerca, con mucho amor y cariño.

En uno o dos años volveré a estudiar, me gustaría hacer una maestría o un posgrado, también me casaré con mi novio y pensamos en tener dos hijos, una niña y un niño, pero antes vamos a viajar mucho.

Andreza Baptistiolli