Entrevista a Cecília Massa, mezzosoprano brasileña (Parte 1)

Sábado, una semana después del Carnaval, el centro de la ciudad de São Paulo se despedía con el desfile de carrozas cerca del Teatro Municipal. Sin duda, estábamos entre lo Sagrado (Teatro) y lo Profano (Carnaval) para entrevistar a Cecília Massa, cantante lírica brasileña, que hoy en día es la gran promesa del panorama musical. Esta joven, originaria de la ciudad de Uberaba (Minas Gerais) y que vive ahora en São Paulo, nos encantó con su voz suave y su semblante tranquilo. En este encuentro narró para los lectores del blog Correveidile su trayectoria profesional y sus impresiones sobre el mundo del canto lírico.

Su interés por la música viene desde cuando era niña, pues sus padres siempre oían música de todo tipo en su hogar, pero fue con 12 años cuando se despertó su gusto hacia la música clásica, en especial hacia el canto lírico, cuando oyó a Montserrat Caballé. Se quedó encantada con la voz de la soprano española y su interpretación. Con el apoyo de sus padres comenzó a ir a clases de música y canto. En un primer momento, formó parte de corales y realizó diversas presentaciones durante su adolescencia. Sin embargo, con tan solo 19 años se produjo el gran giro en su vida.

Cecília se enteró de que había aprobado el examen de ingreso para hacer la carrera de periodismo en la Universidad de Londrina y se mudó para allí con la ayuda familiar con la que siempre contó. Continuó teniendo clases de canto en la ciudad y tuvo la oportunidad de cantar con la Orquesta filarmónica de Londrina. En ese momento, percibió que eso era lo que quería: Ser cantante lírica profesional. Por lo tanto, el cambio fue radical, cambió de curso universitario y de ciudad.

Así fue como acabó viviendo en la ciudad de Campinas (São Paulo), para poder estudiar en la Facultad de Música. Desde entonces, se sumergió en el mundo del canto lírico y se convirtió en una profesional muy activa, con proyectos y espectáculos que reafirmaron su personalidad fuerte y sensible a la hora de percibir el mundo.

Cuando se le pregunta por su cantante de referencia, Cecília no titubea: María Callas. Su elección se basa en la vida profesional que tuvo esta artista. Ella la considera una cantante lírica completa por dominar la técnica vocal, saber interpretar los personajes que representaba y por el compromiso con la música. Otras cantantes también la han inspirado, pero Callas es la que le sirve de modelo. 

Entre sus compositores preferidos, uno se destaca: Johann Sebastian Bach. La elección de este gran compositor no es solo por la calidad de sus canciones, sino que va más allá, es algo espiritual, como ella afirma, que le toca el fondo del alma. Sus canciones le hacen bien, renuevan sus fuerzas y no dejan caer su humor o ánimo. Bach le hace seguir adelante, con el espíritu renovado y la energía necesaria para alimentar su trabajo. (Tal vez, Cecília escuchó a Bach antes de concedernos esta entrevista porque transmitía paz tanto en su gesto como en su voz). 

Las óperas son siempre el punto alto de los cantantes líricos y Cecília no huye a esta regla. Ella tiene afinidad con varios compositores como Mozart o Rossini. A propósito de Mozart, le gustaría actuar en La Flauta Mágica, Così fan tutte o Las Bodas de Fígaro, interpretando por ejemplo el papel de Querubín. No obstante, siempre busca papeles que tengan relación con su perfil y voz.

No cabe duda de que prestar la voz a un personaje es algo fantástico para una cantante lírica y profundizar en el personaje para darle vida es algo mágico. Tal vez, por eso, Cecília se ve reflejada en Callas, porque era lo que hacía: darle vida a los personajes con fuerza y sensibilidad propia. Por esta razón, Callas se convirtió en un gran nombre en la música clásica y, seguramente, Cecília seguirá el mismo camino. 

BLOG CORREVEIDILE: Cecília Massa, ¿podrías hablarnos sobre tu trayectoria? ¿Cuándo, cómo y por qué has empezado en el universo de la música?

CECÍLIA: Bien, yo nací en el interior de Minas Gerais, Uberaba, (Brasil), en el seno de una familia en la que nadie tenía formación musical. ¡Fue algo que ocurrió de manera espontánea! Cuando yo era niña, a mí me gustaba cantar. Empecé a estudiar música con 12 años, puesto que a mis padres les gustaba la música, ellos siempre ponían canciones para que las oyéramos, aunque no hubieran tenido formación musical. Por voluntad propia quise estudiar y tuve suerte, ya que en mi escuela había clases de música, y ese fue el principio de todo. Los profesores me estimularon, aprendí la lectura de la música y participé en diversos proyectos de manera muy natural, entonces empecé a estudiar el canto propiamente dicho. 

Cuando salí de Uberaba, me fui a Londrina a estudiar periodismo y allí todo se abrió porque inicié mis actividades en un coro. Luego me invitaron a hacer un solo que, por coincidencia o no, era el Magnificat de Bach, con la Orquesta Sinfónica de Londrina. Ese fue mi primer trabajo profesional con el canto lírico, cuando tenía 19 años, ya en un coro y con una orquesta muy importante. Como comenté, todo ocurrió de manera muy natural y mis padres me estimularon y permitieron que eso fuese adelante. Después de ese episodio, decidí cursar Música en la universidad y dedicar toda mi vida al canto lírico y, básicamente, esa ha sido mi trayectoria hasta ahora. 

B.C.: ¿Y has permanecido en Londrina o cambiaste de ciudad?

CECÍLIA: Cuando ingresé en la Universidad de Campinas (UNICAMP), para realizar los estudios de Música, me fui a vivir a la ciudad de Campinas y después de allí me vine a São Paulo, por temas de trabajo. Fue algo muy fluido, mis padres nunca me forzaron a nada. A ellos siempre les gustó la música popular brasileña, que en Brasil es mucho más fuerte que el canto lírico. Así que recuerdo que mi primer contacto con el canto lírico fue oyendo a la cantante española Montserrat Caballé, porque ella era famosa en la época por unos trabajos que hacía con música popular, y cuando la oí pensé: “Por Dios, ¡¿Esta es una voz lírica?! ¡Es increíble!” Y enseguida empecé a buscar cosas y a estudiar por mi cuenta. Descubrí, por aquel entonces, que tenía una cierta facilidad en la voz y una pasión sin explicación. Así que profundicé mi repertorio de música barroca y sacra, me encanté y ya no quise parar.

Montserrat Caballé

B.C.: ¿En qué punto de tu trayectoria descubriste este don?

CECÍLIA: La verdad es que fue en mi casa, empezaba a oír canciones e imitaba a los cantantes, algo muy intuitivo. Por aquel entonces descubrí que tenía “una voz”. Charlando con un tío, este me aconsejó que escuchase a María Callas; así que la busqué para saber quién era. Comprobé que se trataba de la mayor cantante lírica del Siglo XX. Empecé a oír sus discos compactos y me llevé una gran sorpresa. Cuando inicié mis estudios con un profesor que tenía conocimientos técnicos, pude comprender mejor cómo era mi voz en verdad, cómo era una voz de una cantante lírica. El proceso de conocer mi voz fue muy interesante, el profesor me decía: “¡Déjate fluir, no fuerces nada, no crees nada!”. Así fue como descubrí que tenía una voz con la cual podía cantar no solo música barroca y sacra, sino también opera. 

B.C.: ¿Qué cantante te ha inspirado más?

CECÍLIA: Mi gran inspiración siempre ha sido María Callas, aunque yo sea mezzosoprano. Su repertorio es totalmente diferente del mío, pero me inspiro en ella porque la veo por encima de todo, como una mujer y una artista sin límites. Ella no era solamente una cantante de ópera, era actriz, intérprete y especialista en la historia de los personajes que interpretaba. Además fue una de las artistas más importantes e interesantes del mundo lírico, por lo tanto, siempre me he inspirado en ella.

María Callas

Sin embargo, como mezzosoprano intento siempre escuchar a cantantes diferentes. No hay una específica en la cual me espeje, pero hay nombres a los cuales admiro muchísimo, como Teresa Berganza o las mezzosopranos de la nueva generación, puesto que enfrentan problemas contemporáneos que me ayudan como ejemplo. De todas maneras, me identifico más con los cantantes de la generación anterior, como Teresa Berganza o Marilyn Horne, que son las cantantes que escucho casi siempre. 

B.C.: ¿Qué consejos les darías a las personas que están empezando la carrera de Música y, en especial de ópera, en Brasil?

CECÍLIA: Estudiar y dedicarse es vital, aunque parezca obvio. En Brasil, la mayoría de las veces uno no tiene el apoyo de una institución o ente formal que pueda ayudarte en la formación como cantante lírico, entonces para mí fue muy importante tener proactividad y ser muy independiente durante todo el curso. Hay que tener clases semanales de canto con un buen profesor, hacer repasos con un buen pianista, estudiar teatro, leer bastante, intentar aprender otros idiomas y buscar buenos ambientes sociales, no solo para hacer contactos –algo que también es importante–, sino también un buen ambiente humano, puesto que el cantante no tiene que cuidar apenas su voz, sino que también debe hacerlo de sí mismo.

Del mismo modo, hay que tener buenas relaciones y ejemplos de personas que puedan guiarte en tu proceso personal, además de tener el control del lado emocional, principalmente si consideramos la gran presión psicológica que el cantante lírico sufre. Otra cosa que siempre intento decir es que antes de ser cantante, soy muchas otras cosas porque a mí me gusta cocinar, leer, hablar con mis amigos, visitar a mi familia… cantar es solo una de las cosas que hago, entonces, si voy con mis amigos cantantes, no es solo por la voz, por el ambiente musical, sino porque soy un ser humano inteligente y creo que voy a sumar algo con mi voz a ese ambiente. Eso es importante porque, en Brasil, no hay un mercado creciente para el canto lírico, entonces hay mucha gente talentosa, principalmente en São Paulo, y grandes artistas que están buscando sus lugares al Sol.

Hay que tener amistad y cultivar el compañerismo, además de comprender que todos forman parte de un grupo común, y no que hay competencia entre ellos, que no son enemigos sino amigos que van a trabajar juntos, que van a compartir las dificultades de montar un concierto o un festival, que van a desarrollar juntos sus carreras. El apoyo mutuo también es importante, sobre todo, para buscar mejores oportunidades, salarios y demás. Ser una persona proactiva también es de suma importancia, además de ser independiente, ética, con valores, capaz de ser amiga y compañera y valorando al otro, esto principalmente en Brasil. 

Entrevista realizada por

Alexsandro Macedo y Carlos Jiménez

con la colaboración de Juliana de Almeida Sarti

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Toda esta semana el blog estará dedicado

a destacar la figura de Cecília Massa.

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