Capítulo 3: “Tiempo
de hechizos”
Crítica por Alexsandro Macedo Silva
Es de noche. En el
bosque se oyen los mochuelos y otros animales nocturnos. De pronto, una figura es
vista, corriendo. Al fondo, se escucha el ladrido de los perros, así como las
voces (gritos, en verdad) de hombres y mujeres. La primera escena del capítulo
crea un aspecto sombrío de persecución de una bruja (¡Por supuesto!).
“Tiempo de hechizos” presenta la historia de Trasmoz (Zaragoza), un pueblo español que fue excomulgado en el siglo XIX. La
excomunión se produjo porque los cultos satánicos que eran practicados por
todas las personas del pueblo. Con este contexto empieza una aventura más de
la patrulla de Amelia. Su misión: garantizar que el poeta Gustavo Adolfo Bécquer
mantenga su propósito a la hora de escribir sus poemas, que son de gran importancia para
el Romanticismo español. El escritor de obras poéticas se habría enamorado de una
mujer, que parecía ser una viajera del tiempo, algo que estaría perjudicando su
producción literaria. El objetivo es apartar a la mujer misteriosa de la vida del
poeta, principalmente porque existe la sospecha de que es una bruja.
La misión sería muy sencilla, pero se transformó en una pesadilla. Amelia y
Alonso son hechizados por las mujeres del pueblo y se involucran con las tareas del pueblo. Pacino, a su
vez, fue el que mantuvo la misión y la llevó hasta al final. El objetivo de
hacer que Bécquer vuelva a escribir sus poemas se logra, pero no
como se imaginaban. Una muerte muestra el lado irracional de la humanidad.
Vale decir que la historia se encuadra durante el Romanticismo, que defendía
que el amor verdadero nunca se concreta en la Tierra. La muerte era algo
deseado por los escritores para huir de un mundo sin sentido, un mundo por el que se buceaba entre la
oscuridad y la ignorancia.
Sin embargo, Pacino
enfrentó otro problema: el hechizo de Alonso y Amelia. Él sabía que alguna cosa iba mal con sus amigos, pero no sabía cómo ayudarles. Los dejó en el
pueblo, puesto que tuvo que huir de los hombres que querían capturarlo y sacrificarlo
durante el culto satánico. Sin duda, fue un golpe doloroso para Pacino el ser
perseguido por sus compañeros, así como también abandonarlos a su suerte.
En cuando eso, en el
Ministerio del Tiempo, Irene preparaba a Lola para ser un agente. La duda que incomodaba
a Irene era la posibilidad de que Lola traicionase otra vez al Ministerio. Vamos a
ver los próximos capítulos para saber sobre el futuro de Lola. ¡Ah, sí, y
sobre el futuro de Amelia y Alonso! Pues ambos han sido rescatados de
Trasmoz envenenados por mandrágora, planta de la
familia de las solanáceas, que tiene
una acción alucinógena y narcótica. Esta planta, en dosis altas, puede causar olvido, así como delirio y locura. ¿Los compañeros de Pacino serán capaces de
sobrevivir a esta intoxicación y volver a tener una vida normal? ¡Que el próximo capítulo
traiga la respuesta!
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