Entrevista realizada por el periodista: Antônio Maura
Traducción al español: Mei Santana
Nélida Piñón dando un discurso en la RAG (Real Academia Galega) |
A su llegada a Madrid, el 29 de octubre (2016),
Nélida Piñón acepta hablar para la Revista
de Estudios Brasileños en el hotel donde estará algunas horas antes de su
regreso a Rio de Janeiro. Después de un viaje de tres semanas a Portugal, donde
fue miembro del jurado del Premio José Saramago, y en España, en Cataluña y Galicia,
la escritora no puede ocultar la fatiga, por ende su bondad la supera y sabe
responder a cada una de las preguntas con una sonrisa amable, con una frase certera
que se redondea como un anillo enredado en el aire.
Han quedado atrás las presentaciones de
su último libro en Barcelona, en la compañía de Carme Riera, o en Galicia,
donde recibió aplausos y honores, en especial, en el Ayuntamiento de Cotobade
(Pontevedra), lugar de origen de su familia, en la entrega del premio “Nélida
Piñón” (instituido por esa localidad), así como la inauguración de la “Casa do
Povo” que llevará su nombre. La escritora brasileña no puede ocultar su
felicidad, su orgullo de descendiente de emigrantes que recupera, tras varias
generaciones, el reconocimiento en la tierra de sus ancestros. Antes de iniciar
nuestra charla quedamos en que, tal como lo hacía con su querida Carmen
Balcells, yo hablaría en español, mientras ella lo haría en portugués. Nélida
Piñón fue la primera mujer que presidió la Academia Brasileña de Letras, entre
1996 y 1997, de la cual es miembro desde 1989. Pertenece, entre otras
entidades, a la Academia de las Ciencias de Lisboa, que garantiza la pureza de
la lengua portuguesa y arbitra sobre su expansión en los cuatro continentes. Es
también la única brasileña nombrada “Socia Corresponsal de la Real Academia
Española”, cuyo objetivo es armonizar las lenguas españolas de la Península y
de las Américas.
Este año, Nélida Piñón tuvo el honor de ser titular de la Cátedra José Bonifácio del Centro Iberoamericano de la Universidad de São Paulo (Brasil), sucediendo al político y economista uruguayo de origen español, Enrique Iglesias, y al ex presidente de Chile, Ricardo Lagos. La escritora, autora de unas tres docenas de libros, incluyendo obras narrativas, ensayo, memorias y aforismos, recibió premios tan prestigiosos como el premio Gabriela Mistral, en Chile; el premio Jorge Isaac, en Colombia; el premio Rosalía de Castro, en España; el premio Internacional de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo; el premio Internacional Menéndez Pelayo; el premio Príncipe de Asturias de las Letras; el premio Casa de las Américas; el premio Women Together o el premio El Ojo Crítico, entre muchos otros. No obstante, todas estas distinciones por su trabajo como escritora y pensadora no le han impedido seguir siendo una persona simple, siempre atenta a la situación de los que la rodean y de aquellos que, ocasionalmente, se encuentra en sus numerosos periplos por Europa y América, ya que es, asimismo, Embajadora Iberoamericana de la Cultura.
Este año, Nélida Piñón tuvo el honor de ser titular de la Cátedra José Bonifácio del Centro Iberoamericano de la Universidad de São Paulo (Brasil), sucediendo al político y economista uruguayo de origen español, Enrique Iglesias, y al ex presidente de Chile, Ricardo Lagos. La escritora, autora de unas tres docenas de libros, incluyendo obras narrativas, ensayo, memorias y aforismos, recibió premios tan prestigiosos como el premio Gabriela Mistral, en Chile; el premio Jorge Isaac, en Colombia; el premio Rosalía de Castro, en España; el premio Internacional de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo; el premio Internacional Menéndez Pelayo; el premio Príncipe de Asturias de las Letras; el premio Casa de las Américas; el premio Women Together o el premio El Ojo Crítico, entre muchos otros. No obstante, todas estas distinciones por su trabajo como escritora y pensadora no le han impedido seguir siendo una persona simple, siempre atenta a la situación de los que la rodean y de aquellos que, ocasionalmente, se encuentra en sus numerosos periplos por Europa y América, ya que es, asimismo, Embajadora Iberoamericana de la Cultura.
EL
VIAJE POR LA PENÍNSULA IBÉRICA
Antônio
Maura: Estamos con Nélida Piñón, que acaba de llegar de
Galicia. Mañana, vuelve a Rio de Janeiro, pero con mucha generosidad nos ha
concedido parte de su tiempo para una entrevista. Antes de empezar, quisiera
saber sobre su estancia en España y Portugal y que nos diga cómo fue este
viaje, este recorrido por la Península Ibérica.
Nélida
Piñón: Antes de nada más, me gustaría saludar a todos y
expresar el placer de estar a tu lado, un amigo muy querido desde hace mucho tiempo.
Defendemos nuestras estéticas, nuestros idiomas con mucho fervor y ahora
estamos aquí otra vez.
Este fue un largo viaje porque no paré
de hablar: todos los días daba discursos, conferencias, entrevistas y creo que
mi voz no está en su mejor momento, pero no me va a impedir que te hable...
El viaje fue fantástico: tuve varios
pretextos para este viaje y la combinación de todas estas razones me permitieron
permanecer más tiempo y unir todo con mucha suavidad, aunque con mucho trabajo
para mí. El primer pretexto, y gran pretexto, fue el lanzamiento de mi libro en
español, por la editorial Alfaguara, el libro de cuentos titulado La camisa del marido, cuya traducción es
divina. Me puse muy contenta con ella. A propósito, la primera edición ya se agotó,
en menos de un mes.
Dicho lo cual, añado que estuve en
Madrid y tuve el placer de estar acompañada por el gran periodista Juan Cruz y
por la editora Pilar Reyes. Desde allí, fui a Barcelona porque soy miembro
antiguo, ya hace unos quince o dieciséis años, del Foro Iberoamérica, que fue
fundado por Carlos Fuentes hace muchos años. Es un foro muy original, por lo
que es una composición interesante: empresarios, políticos e intelectuales. Y ha funcionado bien en este período. Se trata de un espacio donde se
debaten ideas, pero no se publican.
Por lo tanto, eso te anima a decir mucho
más, tal vez, de lo que se diría si la prensa estuviera presente. De modo que,
se sale muy actualizado de estas reuniones con respecto a los temas
contemporáneos de economía, política, energía, educación. En mi caso, participé
en una mesa dedicada a la cultura y en otra sobre educación.
Después, aún en Barcelona, pasé unos
días promocionando el libro: tuve una presentación en la Casa de América de
Cataluña, en compañía de la gran escritora y académica, Carme Riera. Fue un
encuentro formidable: reví a los amigos y hubo un momento de gran emoción, que
puedo compartir con todos. Esta es la primera vez que vengo a España tras la
muerte de Carmen Balcells, no solo mi agente literaria, sino más bien una gran
amiga, una hermana. Cuarenta y cinco años de una amistad perfecta, así que fue
muy difícil para mí. Aún en Brasil, yo ya le había pedido a su familia que me
alquilasen un coche para irme al pueblo de Santa Fe, en Lérida, donde Carmen
está descansando, enterrada. Todos querían acompañarme, pero les dije que no,
que necesitaba estar sola. Una amiga del alma. Y fue muy bonito. Quizás ese
haya sido el momento más sensible del viaje, en lo que atañe a, digamos, esa
verdadera despedida de Carmen Balcells.
Carmen Balcells, la agente más importante del universo editorial, fallecida en 2015 |
Bueno, después me fui a Lisboa, porque
soy miembro del jurado del premio José Saramago, desde hace unos catorce años. Es
un premio que ha elegido a grandes escritores de talento, de modo que ya tiene
mucho prestigio. Como después tenía compromisos en Galicia, quise irme en taxi
y fui contemplando el paisaje. La diferencia del viaje en avión, es que cuando
se reduce la velocidad, se ve la graduación del paisaje, más verde, menos
verde, formas más o menos suntuosas, uno convive con la naturaleza. También,
esta vez, tuve la alegría de alojarme en el Parador de Pontevedra, que está en una
ciudad muy hermosa, elegante, antigua, tiene calles muy estrechas... Yo diría
que la pátina del tiempo confiere a la ciudad un acertijo.
Allá tengo muchos amigos y fue donde
comenzó mi recorrido hacia la promoción de mi libro. Pero, más allá de eso,
hice una presentación en la librería Paz, de un libro precioso titulado Tierras de Cotobade, que es de donde
procedo y mi familia. Y le había prometido a los autores que vendría al
lanzamiento del libro para hablar sobre él. Vine, lo cumplí. Y a continuación, también
fui a la entrega del galardón al vencedor del premio Relatos cortos Nélida Piñón,
en una ceremonia muy bonita. Y ahí me llevé una gran sorpresa: fue conmovedor. Inauguraron
en Cotobade, la tierra de mi padre, una Casa de cultura llamada “Nélida Piñón”.
Fue un momento de mucha felicidad.
Después di conferencias en La Coruña y
en Santiago de Compostela, no paré ni un minuto. Y ayer hice una cosa muy
interesante para las personas a las que les gustaría conocer la vida de Rio de
Janeiro, en la década de 1960-1970. Había allí, en Rio de Janeiro, un restaurante
mítico, legendario, llamado “Antonio’s”. El “Antonio’s” era un recoveco, el
lugar adonde iban los bohemios, los intelectuales, periodistas; no había ni tan
siquiera un carioca, ni un visitante en la ciudad que no quisiese ir al
"Antonio's", donde estaba la figura interesantísima de un gallego,
Manolo Romar, que llegó pobre y, de un tirón, aprende, asimila las normas de la
ciudad y coexiste. Se trata de un hombre de extraordinaria gentileza. De modo
que, él fue el dueño de este restaurante.
A guisa de explicación, me acuerdo de
que, a veces, iba al restaurante, me encantaba porque las mesas eran tan
vecinas que uno participaba de la tertulia ajena. Muchas veces conversé con Tom
Jobim, con Vinícius de Moraes, grandes figuras de la cultura, de la creación
brasileña, solo que evitaba ir a menudo, pues cuando iba, el propietario me
mandaba flores. Era un hombre muy galante. Me invitaron ahora, a causa de este
libro que salió ayer, para hablar de esos tiempos y yo no me podía negar. Entonces,
no hago otra cosa sino hablar, querido amigo, pero estoy muy contenta de estar
aquí contigo.
LA
NARRATIVA COMO UNIVERSO NATURAL
AM: Nélida,
decía antes que acabas de lanzar La
camisa del marido en español, en realidad, es un libro que tuve ahora la
oportunidad de releer en español. Como has dicho, reconozco que la traducción
es magnífica, con una gran fluidez. Y mi pregunta sigue en esta dirección, este
libro de relatos surge después de casi diez años sin que practicaras la
narración...
Nélida
Piñón: Tengo un libro, una novela, casi listo. Pero lo abandoné.
Pero, continúa, por favor…
AM: Mi
pregunta era exactamente esta, pero ¿por qué ahora la narración? Sin embargo,
estás diciendo que hay un libro...
Nélida
Piñón: Porque la narración, la narrativa, es mi universo
natural. Yo soy una mujer para quien la narración es una expresión de la vida. Como
también el pensamiento. Yo mezclo los dos grandes géneros, las dos vertientes
que se completan y me completan: pensar y traducir el pensamiento en una
variación de la vida, de la literatura, de la estética; crear modelos estéticos
y analizarlos. He escrito libros de ensayos, libros de memorias... De cierto
modo, cuando se lidia con la memoria, se lidia con la invención. La memoria traiciona.
La memoria no es fiel; no puede ser mimética porque empobrece aquello que se
está contando.
De alguna manera, creo que también me
ejercité en una cierta narrativa, en apariencia diferente, también con estos
últimos libros que he publicado, puesto que no dejé de publicar, he seguido
publicando todo el tiempo. Claro está que esta vuelta a los cuentos, a los relatos
cortos como dicen, me encantó porque es un ejercicio de creación muy distinto. A
mi juicio, el gran océano es la obra, la novela, donde todo cabe, donde todo es
posible.
Es un espacio inmenso que tiene que ser
ocupado. Y que se puede ocupar, en general, por sagas, por épicas, por muchos
personajes, personajes sumados entre sí, o cada personaje que sea de un vigor
muy específico es, por lo general, un arquetipo. Es la suma de muchas personas la
que genera un personaje. Pero el cuento tiene, por así decirlo, una pequeña
geografía. No se puede, de repente, colocar, invocar a muchas personas dentro
de él, a menos que se mencionen a todas estas personas. Sin embargo, ellas no
van a actuar dentro de la narrativa.
Y además de todo ello, el cuento puede
ser eventualmente lírico, pero pienso que el cuento podría exigir una fuerte
tensión. En un primer momento, uno va graduando, va aumentando, intensificando,
hasta el final. Él tiene una especie de epílogo, algo que pienso que la novela
no tiene técnicamente, pero ella te deja un lastre, que da la impresión de que se
terminó la lectura, sin embargo en algún otro lugar aquella lectura prosigue. Esto
es lo que yo pienso de la novela.
La novela se fija mucho en el
pensamiento del lector. Claro que el cuento puede ser algo violento, puede ser
fuerte, hay cuentos maravillosos que nunca son periféricos, son centrales, son
fundacionales. Eso dependerá de la calidad que tu cuento vaya a tener y que tú hayas
tenido la suerte de producir.
Continuará... ¡No te pierdas el final!
Un extraordinario paseo por la importancia de amar lo que uno hace, por encima de todo. ¡Esa es Nélida Piñón! Gracias, Mei, deseando terminar de leer la entrevista...
ResponderEliminarEsta entrevista es como viajar de la mano de Nélida Piñón. ¡Extraordinaria escritora! Felicidades a mi amiga Mei por su trabajo de traducción.
ResponderEliminarPreciosa entrevista!
ResponderEliminarFelicitaciones a todos del blog!
Gracias, mi querida amiga, Estrella de Mar.
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