Charles Romuald Gardes, conocido en el mundo artístico como Carlos Gardel, nació el 11 de diciembre de 1890, en Toulouse (Francia); hijo de Berta Gardes que, en la época, fue abandonada por su marido, por eso, se vio obligada, en 1893, a vivir en Argentina, llevando a su pequeño Charles, buscando mejores condiciones económicas. Siendo así, Carlos tuvo tanto una infancia como una adolescencia feliz en los muchos locales del barrio de Abasto, donde cursó la escuela primaria en los colegios San Carlos y San Estanislao.
Sin embargo, dejó los estudios durante el segundo año de la escuela secundaria para dedicarse a la música al conocer a José Betinotti, un destacado nombre de la canción criolla. De manera que Gardel, bajo la batuta de José, empezó a presentarse en locales del barrio, interpretando canciones criollas y payadas, pues aún no existía el folklore ni tampoco el tango. Por lo que sigue, en 1911, junto a José Razzano, formó el dúo Gardel-Razzano hecho muy importante para la carrera artística de Gardel. En 1912, llegará el guitarrista y cantante Francisco Martino, transformando así el dúo en trío.
Esta nueva agrupación musical participó en los Festivales de la Casa Suiza de calle Rodríguez Peña 254, alcanzando un gran éxito, que culminó con una invitación para que Gardel grabara sus primeros discos en la empresa Columbia Record con temas del folklore. Por otra parte, en 1913, el trío se transformó en cuarteto con la llegada del cantante Saúl Salinas; por esta razón, el nuevo cuarteto puso en marcha una gira por Buenos Aires, pero Salinas rápidamente, dejó el grupo, entonces, los músicos que formaban el trío siguieron juntos hasta diciembre de 1913, cuando el guitarrista Francisco Martino decidió también dejar el grupo.
Al final, el dúo Gardel-Razzano volvió en definitivo
y, ese mismo año, empezó un nuevo proyecto musical en el gran Cabaret
Restaurant Armenonville, interpretando canciones criollas con gran éxito. A
partir de enero de 1914, iniciaron desde el Teatro Nacional de Buenos Aires una
gran gira por varias ciudades de Argentina, como: Rosario, Santa Fe o Córdoba
y, además, en 1915, el dúo rompió las fronteras y se fue a Uruguay y Brasil. No
obstante, Gardel recibió un disparo de arma de fuego y, como consecuencia, un
proyectil del arma se le alojó en uno de los pulmones para siempre, hecho que le
dejó por un tiempo alejado de la música.
En 1916, a pesar de todo, reinició su carrera
artística con varias presentaciones en Mar del Plata. Al año siguiente, canta
por primera vez en público un tango, de manera que, empieza a interpretar
tangos en algunas oportunidades. Este ritmo nadie lo conocía en la época, así
que en una presentación en el Teatro Empire de Buenos Aires canta el tema “Mi
noche triste”, tango compuesto por Samuel Castriota y Pascual Contursi, y es todo
un éxito.
A partir de ahí, Gardel pasó a interpretar tangos en
todas sus presentaciones, por eso, en 1917, la Casa Glücksmann los contrató
para grabar. Asimismo, el dúo tuvo una participación muy importante en la
película titulada “Flor de Durazno”, puesto que, ya tenían que hacer una gira
por algunas regiones de Chile, o sea, el dúo Gardel-Razzano hasta 1924, estuvo
junto y realizó giras inolvidables por toda Argentina, Uruguay, Brasil y España.
Durante ese largo período de tiempo estuvieron acompañados por grandes músicos,
como: José Ricardo, Guillermo Desiderio Barbieri y, también, por la Orquesta de
Francisco Canaro y la Orquesta de Osvaldo Fresedo.
En cierta medida, Gardel ya había elegido el tango
como su inclinación musical, aunque la música criolla y el folklore formasen
parte del gusto musical de la mayoría de las personas. En 1925, Carlos empieza
una nueva carrera artística como solista y este comienzo se marca con una gira que
inicia en España, junto a la Compañía Rivera de Rosas, en una presentación
memorable en el Teatro Goya de Barcelona. Así pues, Gardel se convirtió en un nombre
muy conocido como cantante de tango, en otras palabras, un estilo musical que
nació con el talento y la creatividad artística del propio Gardel.
Por tanto, Carlos hasta 1933, hizo giras interminables entre Argentina y Europa, pero extremadamente exitosas en países como: Italia, Inglaterra, Francia, Alemania y España y, además, realizó participaciones en algunas películas: “Espérame”, “La casa es seria” y “Melodía de Arrabal”, junto a Alfredo Le Pera, compositor de los tangos “Melodía de Arrabal”, “Silencio” o “Me da pena confesarlo”, entre otros. Por consiguiente, a partir de 1933, y después de algunas presentaciones por Argentina y Uruguay y de grabar el tema titulado “Madame Ivonne”, Carlos Gardel hizo su última gira por Europa y Estados Unidos; ya en este país, Gardel al lado, una vez más, de Alfredo Le Pera participó como protagonista en las películas tituladas “Cuesta abajo”, “Mi buenos Aires querido” y “Tango en Broadway”, para la Paramount de Nueva York.
A inicios de 1935, Carlos vuelve a ser protagonista
de las películas: “El día que me quieras” y “Tango bar”, con las
interpretaciones de temas que se eternizaron en la voz de Gardel. Por esta
razón, Carlos, junto a su equipo de músicos, decidió empezar una gira por
Puerto Rico, Venezuela, Aruba, Colombia, Panamá, Curazao, Cuba y México. Así, el
1 de abril empezó su gira por Puerto Rico, donde más de cuarenta mil personas
lo esperaban y el éxito fue tan grande que Gardel tuvo que permanecer en este
país una semana más, es decir, solo llegó a Venezuela el 25 de abril.
Casa Museo de Gardel, Buenos Aires |
En Venezuela, fue recibido por una multitud de mujeres que lo acompañaba por las calles, intentando verlo y abrazarlo. El 23 de mayo Gardel llegó a Curazao y actuó cinco noches, ya el 28 de mayo estuvo en Aruba, donde las personas lo llevaron por toda la ciudad, pero el 2 de junio empezó la parte final de su gira al llegar a Colombia, cuando la población de Barranquilla lo recibió, demostrando cada vez más, su pasión por el tango, de manera que, lo buscaban para abrazarlo y lo mismo ocurrió en las ciudades de Cartagena, Medellín y Bogotá.
Como consecuencia, en la plaza Bolívar, el 23 de junio, después de una presentación exitosa, Gardel profirió estas palabras en agradecimiento a la población de Colombia: “Antes de cantar mi última canción, quiero decir que he sentido grandes emociones en Colombia. Gracias por tanta amabilidad. Encuentro en las sonrisas de los niños, las miradas de las mujeres y la bondad de los colombianos un cariñoso afecto para mí. Me voy con la impresión de quedarme dentro del corazón de los bogotanos. Voy a ver a mi vieja, pronto. No sé si volveré, porque el hombre propone y Dios dispone. Pero es tal el encanto de esta tierra que me recibió y me despide, como si fuera su hijo propio, que no puedo decirles adiós, sino hasta siempre”.
El 24 de junio de 1935, Gardel y su equipo musical se reunieron en el hotel Granada y después fueron al aeropuerto de Medellín, donde iban a coger el avión que los llevaría hasta Cali, tristemente, en el aeropuerto de Medellín el avión que llevaba a Gardel y a su equipo musical chocó contra otro avión, incendiándose ambos ante toda la prensa y gran parte de la población de Medellín.
En suma, Carlos Gardel falleció fatalmente, pero
sigue siendo el máximo exponente del tango y nadie podrá interpretar un tango
sin recordar su importancia, la del verdadero eterno embajador del tango. Por
eso, para homenajear a este gran artista seleccioné una canción que se titula
“Soledad”, compuesta por Alfredo Le Pera e interpretada por el propio Carlos
Gardel.
¡Espero que la disfrutéis!
Jorge Martins
“Soledad”
Yo no quiero que nadie a mí me diga
que de tu dulce vida
vos ya me has arrancado
mi corazón una mentira pide
para esperar tu imposible llamado.
Yo no quiero que nadie se imagine
como es de amarga y honda mi eterna soledad.
Pasan las horas y el minutero muere
la pesadilla de su lento tic-tac.
En la doliente sombra de mi cuarto, al esperar
sus pasos que quizás no volverán.
A veces, me parece que ellos detienen su andar
sin atreverse luego a entrar,
pero luego no hay nadie y ella no viene,
es un fantasma que crea mi ilusión
y que al desvanecerse va dejando su visión,
cenizas en mi corazón.
En la plateada esfera del reloj
las horas que agonizan se niegan a pasar.
Hay un desfile de extrañas figuras
que me contemplan con burlón mirar.
Es una caravana interminable
que se hunde en el olvido con su mueca espectral.
Se va con ella tu boca que era mía,
solo me queda la angustia de mi mal.
En la doliente sombra de mi cuarto, al esperar
sus pasos que quizás no volverán.
A veces, me parece que ellos detienen su andar
sin atreverse luego a entrar,
pero no hay nadie y ella no viene,
es un fantasma que crea mi ilusión,
y que al desvanecerse va dejando su visión,
cenizas en mi corazón.
Fuentes
consultadas:
Datos que tal vez no conocías
de Carlos Gardel | Cultura
Historia de la música
popular uruguaya » Carlos Gardel (historiadelamusicapopularuruguaya.com)
Biografía de Carlos
Gardel por Pablo Taboada - Todotango.com
Carlos Gardel | Sitio
oficial de turismo de la Ciudad de Buenos Aires
Carlos Gardel en sus
distintas etapas, por Roberto Cassinelli - El Historiador
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