Juliana de Almeida Sarti
Nacida en Madrigal de Altas Torres, el 22 de abril de 1451, Isabel I de
Castilla, también conocida como Isabel la Católica, vivió hasta sus 53 años, cuando
murió en Medina del Campo, el 26 de noviembre de 1504. Sin embargo, sus hechos
sobrevivieron a sus años de vida, pasando a la Historia como una reina de gran
importancia no solo para España, sino también para todo el mundo.
De hecho, toda su trayectoria como titular de la corona de Castilla se destaca por los momentos en los cuales su fuerza y capacidad para gobernar un reino fueron puestas a prueba. En primer lugar, cuando Isabel se autoproclamó reina, tras la muerte de su hermano Enrique IV, enfrentando el reproche de muchos, aunque estuviera cercada por fuertes defensores. Después, al casarse con Fernando de Aragón, mantuvo una relación conturbada, a pesar del amor que surgió entre ellos.
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| Los Reyes Católicos aplicando justicia |
De igual importancia que los lazos familiares, la religión católica fue una
constante en la historia de Isabel y, como consecuencia, una de las bases de su
reinado. Considero que, en ese punto, los excesos cometidos, y que resultaron en
el oscurantismo de la Inquisición, fueron manchas negativas durante el gobierno
de los Reyes Católicos.
Por último, si comprender los puntos de la historia de Isabel desde su principio es algo que te gustaría hacer, merece la pena acompañar la serie que lleva su nombre, producida por Rtve, en cuyos capítulos verá, con riquísimos detalles, su asunción al trono, su matrimonio y las pérdidas familiares, llegando, por fin, a su muerte dolorosa.
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