Considerada por gran parte de la crítica como la
segunda novela más exitosa de la literatura española, quedando detrás solamente
de el Quijote, La Regenta fue publicada en dos tomos, en los años 1884 y 1885.
Obra maestra de Leopoldo Alas “Clarín”, a través de la cual el autor expone
duras críticas a la sociedad de aquella época, hay en La Regenta un auténtico
ejemplar de la literatura naturalista y realista.
Como resultado de la publicación de una obra cuya
idea principal era exponer las debilidades de la sociedad, abordando temas como
la religión, la familia y la postura femenina, “Clarín” obtuvo el rechazo de la Iglesia, por considerarla escandalosa. Lo mismo pasó con la población de
Oviedo, ciudad a la cual el autor estuvo siempre muy vinculado: la ojeriza fue
grande, por interpretar que la ciudad de Vetusta era, en verdad, un disfraz
para criticar la capital de Asturias.
Fotograma de la serie, con Ana Ozores y el magistral
Pero, ¿de qué manera toda esa crítica toma forma? En
resumen, a través del personaje principal de Ana Ozores, una joven que se casa solo
por cumplir un formalismo social con Víctor Quintanar, el exregente de Vetusta.
Desde ahí se desarrollan todos los temas de la novela: la crítica a la mujer
llamada adúltera, el peso de la Iglesia en las decisiones de la sociedad y la idea de la “institución familia”, solo por citar algunos. Es probable que, debido a esas
semejanzas, algunos especialistas hayan apuntado vínculos con la obra de Flaubert, Madame Bovary.
Para concluir, conviene citar que La Regenta, así como las demás obras de esta
época que proporcionaron una reflexión crítica sobre todo lo que pasaba en el
período, fueron de gran importancia para que los abusos en todas las esferas
viesen la luz y pudiesen, por lo menos, ser discutidos e, incluso, adaptados a
la pantalla, a ejemplo de la serie del mismo nombre, producida por RTVE en
1995, la cual merece la pena ver como introducción a los temas abordados en la
novela.
Juliana de Almeida Sarti
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