¡Somos todos campeones! Porque estamos
vivos y podemos ser lo que queramos. La vida nos permite disfrutar momentos de
tristeza y alegría, fracaso y éxito, fuerza y debilidad. Campeones son todos aquellos
que simplemente viven con o sin (dis)capacidades. Así se construye el contenido
de esta película, con historias de superación o, tal vez, de aceptación de la
realidad.
La narración se inicia con el juicio
de un entrenador de baloncesto por conducir su coche en estado de embriaguez. Este
personaje se muestra altanero, egoísta, ególatra. Así que es sentenciado a trabajos sociales o, de lo contrario, irá a la cárcel. Considerando
su profesión, va a entrenar a un equipo de baloncesto compuesto por personas
con “limitaciones mentales”. El objetivo consiste en prepararlos para participar
en un campeonato anual de baloncesto como un grupo unido, cuyos miembros se ayuden mutuamente.
Sin embargo, un hecho particular dificulta la consecución de esta meta: el
entrenador no siente que forma parte de este equipo.
Sin duda, la película es cómica, pero aborda un tema importante y sensible: el de las personas con necesidades
especiales que quieren y deben pertenecer a la sociedad. No es posible cerrar los ojos ante los que tienen la capacidad de trabajar, jugar, sentir y amar.
Por lo tanto, no deben ser marginados, sino incluidos en la sociedad.
Campeones va a divertirte y hacerte
reír, pero también te provocará una profunda reflexión sobre la vida. Al final, una
emoción brotará de tu corazón y percibirás que la vida está hecha de pequeños momentos
que deben ser vividos intensamente.
Cervantito, El Perro
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